sábado, septiembre 14, 2013

Adios, compañeros... adios.

Y simplemente se alejan las cosas que eran... Aquello que fue el día de ayer, ya no lo es hoy. De esa forma me despediste de tu vida, y al día de hoy solo me quedan las cenizas de tus sombras.

No voy a cerrar este blog, no creo hacerlo nunca pues aunque ya no le pongo atención (y es muy posible que esta sea de las últimas entradas que vuelva a hacer) contiene muchas cosas que he vivído, que me traen buenos y malos recuerdos pero especialmente es mi "diario" en el que puedo ver cómo he crecido personalmente y gramáticamente.

Y ya, que se me queman los frijoles (porque yo cocino de noche frijoles ¿algún problema?)